A las calles de Madrid, otra vez...
Una semana en Galicia, una semana en Andalucía. Suficiente para aguantar otros cinco o seis meses aquí.
La visita a Granada, ha sido cuanto menos interesante. Como me acompañaba mi novio me lo llevé a sitios " especiales " dentro de la ciudad. La primera parada fué mi colegio... mi odiado colegio en el pasado y paradojicamente mi precioso colegio ahora.
Decidimos pasar por allí sobre las 14:00 del mediodía para poder entrar al patio y que lo viera de cerca. Bajando la calle salían los primeros alumnos y un nudo se hizo dueño de mi garganta. Cuando sono aquella antigua adorada sirena y los niños empezaron a correr y a salir, los recuerdos hicieron que la melancolía tomara control absoluto de mi alma, haciendome volar al pasado.
Aquel patio donde jugué tantas y tantas veces, aquellas conversaciones con las que por entonces consideraba mis amigas eternas, aquellos proyectos, aquella visión de como sería mi futuro cuando atravesara esa puerta con mi Graduado Escolar. No fuí capaz de sentarme en el banco de enfrente. Estaba lleno de adolescentes que no entenderían la razón de mis lagrimas. Y no pude evitarlo, me sentí adulta. Tremendamente adulta. Pero también me sentí fiel a los principios, propositos y sueños que nacieron entre aquellas paredes.Todo estaba allí. Casi igual que cuando me fuí ( con la intención de no volver jamas jajaja ) y me di cuenta que hasta yo era en cierto modo la misma.
David, mi querido David me comprendió sin apenas hablarnos nada. Y respeto mis silencios y me escucho contar las mil y una anecdotas que le conté con toda la paciencia del mundo. ( Mira, aqui cogí el primer cigarro, aqui me pelee por primera vez, aqui fué la primera vez que un chico se me declaró, aqui había un arbol...)
Quizás la mayor ausencia fué un precioso y viejo Sauce Llorón que reinaba el patio. De pequeña, ese Sauce se convertía en todo un palacio capaz de albergar elfos, hadas, gnomos, princesas y principes.... Me chocó no verlo ahí, pero mis recuerdos pudieron más que su ausencia.
Asi que lo que pensaba que iba a ser un viaje solamente familiar, se convirtió en un viaje al pasado, que me hizo recuperar un cachito de mi misma. Os cuento más cositas conforme me vayan saliendo.
Gracias por leerme de nuevo.
Danae
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